lunes, 17 de diciembre de 2012

RETROCESO Y DESESPERANZA


Nuestro país está efectivamente de luto y es hora de colgar los listones negros.  El Congreso, en un acto inconstitucional, ilegal, infundado e injustificado decidió destituir a cuatro magistrados de la Sala de lo Constitucional.  Con ello ha violentado nuestra forma de gobierno basada, según nuestra Constitución, en tres poderes complementarios e iguales.  Como ningún poder está supeditado a los otros, y debido a que los funcionarios públicos no tienen más atribuciones que las que explícitamente les confiere la ley, la destitución de los magistrados es nula y no debe acatarse.  Se trata de un acto ilegal e inválido que los magistrados supuestamente destituidos no deben acatar.  Deben continuar asistiendo a sus labores y desempañándolas como si nada hubiera ocurrido.  No deben aceptar que se violente y destruya el estado de derecho.  De otra forma nuestra institucionalidad sufriría un grave retroceso.